Las autoridades saudíes decidieron aplazar hasta nuevo aviso la decisión sobre qué compañías estarán autorizadas para ofrecer conexión a la red en ese país, informa BBC News. La razón del anuncio sería que el Ministerio del Interior aún no ha establecido los mecanismos necesarios para censurar sitios web internacionales que ofrezcan contenidos indecentes. A entender de las autoridades saudíes, indecente no sólo se limita al material pornográfico existente en la red, sino también a sitios web que presenten puntos de vista políticos y religiosos no oficiales.
Sin embargo, la protección que las autoridades saudíes quieren dar a sus ciudadanos no se aplica para la elite política y empresarial, que desde hace años dispone de acceso a la red, no censurado, mediante conexiones telefónicas de larga distancia con proveedores de acceso situados en otros países.
Arabia Saudita lleva ya siete años planeando la forma en que sus habitantes tendrán acceso a Internet