Si ha estado atento a lo que se dice sobre SD-WAN, indudablemente está familiarizado con muchos de sus supuestos beneficios:
– SD-WAN, mediante la automatización y la orquestación, aumenta la agilidad del negocio permitiendo a los proveedores de servicio aprovisionar o reconfigurar nuevas conexiones en minutos u horas, en lugar de semanas o meses.
– SD-WAN mejorará la experiencia del usuario empoderando al departamento de TI para dar prioridad al tráfico más importante, de forma que el correo electrónico tradicional no tenga la misma prioridad que las videollamadas al departamento de ventas.
– SD-WAN mejora la calidad del servicio al permitir que el tráfico sea redirigido hacia rutas de respaldo operadas con tecnologías WAN alternativas, si es necesario.
– SD-WAN ahorra dinero al enrutar el tráfico a través de conexiones de banda ancha económica, a la vez que ofrece una calidad de servicio mejorado, a un costo inferior que una WAN estática tradicional.
– SD-WAN también permite a las empresas aprovechar las ofertas de NaaS (Network as a Service) de los proveedores de servicio (a la vez que permite a estos últimos habilitar tal oferta).
SD-WAN apalanca la virtualización, capacidad de programación de la red y orquestación, para que sea más fácil, más rápido y menos costoso para las empresas y proveedores de servicio enrutar el tráfico de redes de la manera más adecuada para los requisitos del negocio, para conectar sucursales, construir nubes híbridas, entregar servicios de IoT, etc. Para los proveedores de servicio, SD-WAN abre nuevas oportunidades de servicios que respondan a las necesidades de conectividad cada vez más complejas de las empresas.
SD-WAN también promete reducir costes, principalmente en forma de reducción de costos de inventario y de aprovisionamiento manual. Como tecnología, SD-WAN suena muy bien -y lo es- al ofrecer una gran promesa para los proveedores de servicio y clientes por igual.
Sin embargo, los beneficios son sólo una parte, y no el relato completo. Como una tecnología emergente, SD-WAN también implica un cierto grado de riesgo y requiere una cierta cantidad de cambios.
La agilidad del servicio es importante; la calidad del servicio es fundamental
En un concurrido mercado impulsado por la calidad de la experiencia, la calidad del servicio es un diferenciador clave para la conectividad, que incluye SD-WAN. Una empresa privada con una WAN tradicional, privada, estática, ya tiene una red de alta disponibilidad, ultra confiable para su tráfico crítico. Para una empresa sin una WAN privada, estática, que requiera una experiencia mejor de la banda ancha, la calidad de servicio asegurada por una solución SD-WAN también es crítica para la percepción de valor.
Sigue habiendo, sin embargo, cierto debate sobre si SD-WAN puede igualar la calidad y la capacidad de una WAN tradicional, estática. Desde una perspectiva tecnológica, SD-WAN sustituye a dispositivos de propósito único dotados de estándar y software programable que puede ser gestionado de forma centralizada. ¿Puede la infraestructura virtual que subyace en SD-WAN entregar la misma baja latencia que la infraestructura física? ¿Y qué pasa con el jitter?
Para que una SD-WAN sea exitosa, la calidad del servicio asegurado es una necesidad para los clientes. Las llamadas no pueden desconectarse. Las aplicaciones no pueden congelarse. Los procesos de respaldo en la nube no pueden fallar. Seguro usted mismo podría aportar todas las otras razones que dan carácter crítico a la conectividad confiable.
Del mismo modo, desde la perspectiva del proveedor de servicios, los beneficios de ofrecer soluciones SD-WAN deben ser mayores que los riesgos. Las WAN estáticas constituyen una dimensión conocida, junto con ser muy fiables. Las nuevas tecnologías implican curvas de aprendizaje, cambio cultural, riesgo para la reputación, rotación potencial y otros desafíos. Pero a pesar de las interrogantes, la tecnología continúa avanzando.
Asegurar la calidad del servicio es la base para el éxito de SD-WAN
En pocas palabras, SD-WAN puede proporcionar un alto nivel de calidad de servicio con un nivel de flexibilidad y un coste que sería difícil conseguir con una solución WAN estática. A medida que los nuevos servicios son desplegados con mayor volumen y con mayor rapidez, la garantía de servicio nunca había sido más crítica. Con todo, asegurar la calidad del servicio SD-WAN a través de redes híbridas, de múltiples proveedores, multi dominio, es un gran desafío. El servicio de datos puede involucrar a múltiples proveedores, geografías, anchos de banda, elementos virtuales y/o físicos, niveles de rendimiento, clases de servicio diferenciadas, fiabilidad, interrupciones relacionadas con fenómenos atmosféricos e incluso eventos que afecten el tráfico de la red (como por ejemplo, la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos). El volumen de datos que fluye por la red es formidable.
Para asegurar una SD-WAN de manera efectiva, el personal de operaciones necesita ser capaz de visualizar, monitorizar y gestionar el servicio completo, de extremo a extremo, de forma unificada e integral.
Uno podría preguntarse, con razón: ¿pero por qué no pueden las soluciones tradicionales de garantía de servicio conseguir todo lo anterior? La respuesta corta es “no completamente”. Muchas de las soluciones tradicionales de garantía sólo aseguran algunos de los dominios de red necesarios para ofrecer soluciones SD-WAN. Muchas soluciones son específicas para cada proveedor. Muchas otras soluciones no están preparadas para SD-WAN porque no pueden garantizar los servicios que utilizan SDN (Software Defined Networks) o NFVI (Network Function Virtualized Infrastructure) – dos facilitadores tecnológicos fundamentales para las soluciones SD-WAN.
El resultado es que para muchos de los técnicos de operaciones, asegurar la calidad de un servicio de datos y analizar en profundidad cuando un servicio falla, puede requerir consultar una gran variedad se diferentes aplicaciones e interfaces y luego hacer conjeturas sobre correlaciones.
Para sacar el máximo provecho de SD-WAN, los proveedores de servicio necesiten una solución rica, multi-dominio, de garantía de servicio que conecte fallos, rendimiento, utilización, tickets, topología e inventario – todo en un panel único. La garantía de servicio unificada permite al personal de operaciones de red supervisar y garantizar la calidad de la experiencia de una manera holística, que en todo momento tenga presente el cliente, a través no sólo de SD-WAN, sino también en los servicios subyacentes de la red, y en aquellos elementos que tienen un impacto en la calidad del servicio SD-WAN.
La buena noticia es que la solución correcta de aseguramiento de servicios unificados permite a los proveedores de servicio ver cómo y dónde radican los problemas que afectan la experiencia del cliente, y no sólo determinar qué dispositivo, fabricado por un proveedor en particular, está teniendo problemas en un sector particular de la red. Esta perspectiva impulse la recuperación rápida; reduciendo el tiempo de triaje, tiempo de gestión y MTTR, incluso a través de enlaces entre carriers.
Digamos que hay mucha congestión en un enlace óptico particular. Los ingenieros del operador pueden ver, a simple vista, qué SD-WANs están afectadas y, igualmente importante, que clientes – y así redirigir el tráfico antes que los clientes sientan el impacto.
Hay muchas razones para implementar SD-WAN, y la tecnología tiene sentido, por igual, para las empresas y los proveedores de servicio. A los directores financieros les encantará el nuevo ROI, mientras que los proveedores de servicios aprovecharán las oportunidades que trae consigo SD-WAN. Sin embargo, para sacar el máximo provecho de la tecnología, los operadores también necesitan soluciones de garantía de servicios unificados que aseguren la calidad de los servicios SD-WAN que están desplegando.
Por Chris Purdy, CTO, CENX
Versión en español exclusiva para Diario TI (Fotografía: Diario TI)