Citando fuentes anónimas al interior de Microsoft, el sitio The Verge escribe que la empresa planea una conferencia de prensa para el día 30 de septiembre, en que presentará al sistema operativo Windows 9.
El lanzamiento de la próxima versión de Windows, conocida internamente por su nombre en clave “Threshold” (Umbral), está agendado para la primavera boreal de 2015, pero los desarrolladores y los medios podrían tener acceso a una versión beta durante los próximos meses.
Se espera que Windows 9 presentará un “mini menú de inicio”, soporte para escritorios virtuales, y ventanas separadas para aplicaciones. Específicamente, Microsoft estaría intentando revertir la negativa situación creada con la anulación del botón de inicio en Windows 8.
Recientemente, la consultora Gartner pronosticó que la mayoría de los usuarios de Windows 7 se saltará Windows 8 por completo, cuando el soporte extendido para la versión 7 caduque el 2020, adoptando directamente Windows 9.
Al respecto, la empresa escribió recientemente en su blog que para muchas empresas, la adopción de Windows 8 en estos momentos “tiene poco valor”, a menos que se trate del sistema operativo pre instalado en computadoras nuevas.
Según las últimas estadísticas de Net Marketshare, Windows 7 representó en julio el 51,22% de los sistemas operativos instalados en computadoras conectadas a Internet.
Paralelamente, Windows 8 y Windows 8.1 se contrajeron por segundo mes consecutivo, desde un 12,64% observado en mayo al 12,48% en julio. Aunque con leve margen, la conclusión es clara: Windows 8 se contrae en lugar de crecer.
La reacción de Microsoft ante tales estadísticas fue automática y estándar: “Windows 8.1 es ideal para los negocios, ya que está diseñado para ofrecer las experiencias que la gente quiere, junto con ofrecer a las empresas las capacidades de nivel empresarial que necesitan”.
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