Un vocero del Ejército recalcó que los hackers no lograron penetrar los sistemas internos de la institución, y que sólo habían logrado vulnerar la seguridad del servidor web, que estuvo bajo su control por espacio de nueve horas.
El ataque se inscribe en una lista que ya comienza a ser extensa, de arremetidas informáticas contra sitios web oficiales en EEUU. Los ataques de hackers contra tales sitios, además del perteneciente a la OTAN, alcanzaron una intensidad máxima durante el bombardeo aliado de Yugoslavia.