Diversas versiones periodísticas indican que Microsoft está dispuesta a llegar a una solución negociada con la parte acusadora, el Departamento de Justicia, en lugar a optar por un dictamen judicial que, a la luz de los análisis disponibles, iría en contra de la compañía.
La posibilidad de que ambas partes lleguen a un acuerdo tuvo un leve efecto positivo en la cotización de las acciones de Microsoft, aunque algunos observadores consideran poco probable que la reunión de mañana arroje resultados concretos
