Elbrus International es una compañía fundada por un grupo de personas que trabajaban en la ex URSS en el desarrollo de supercomputadoras para las fuerzas armadas del imperio soviético. Con la caída del Muro de Berlín y la disolución de la URSS, pareció quedar la impresión de que Rusia era un consumidor, y no productor, de productos informáticos. El hecho de que la URSS tenía algunas tecnologías incluso más avanzadas que Occidente, también en el área informática, parece ser un hecho olvidado. A pesar de ello, las personas que desarrollaban tales tecnologías siguen existiendo y trabajan en parte en avanzados proyectos de ingeniería informática.
Según Wired News, Elbrus ha desarrollado un procesador de rendimiento extremo, el E2k, que al ser producido mediante la denominada tecnología de 0.18 micrones, resultará en una frecuencia de reloj de asombrosos 1,2 Ghz (1.200 megahertz).
En comparación, puede señalarse que el primer procesador de la futura serie Merced de Intel, tendrá una velocidad de 800 Mhz.
Por su parte, Keith Diefendorff, redactor de la revista Microprocessor Report, escribe que las afirmaciones de Elbrus suenan realmente increíbles, aunque procura no calificarlas de fantasiosas o falsas. Sin embargo, puntualiza luego que es posible que la compañía exagere en alguna medida sus pronósticos, al tratarse de un producto que, a pesar de todo, se encuentra a un año de su eventual lanzamiento.
Diefendorff indica luego que la ventaja de Merced es que se trata de un procesador prácticamente lanzado, mientras que el E2k aún no abandona la mesa de dibujo.
El mayor problema sería que el E2k permaneciera por largo tiempo precisamente en la mesa de dibujo. De hecho, Elbrus carece del capital necesario como para crear un prototipo del superprocesador, menos aún para fabricar y distribuir el producto a gran escala.