La policía de ese país ha logrado establecer nexos entre los cuatro inculpados con una línea telefónica instalada en un departamento de Manila, que un vocero policial describió como un nido de hackers.
Según ha trascendido, uno de los factores que permitió establecer tempranamente la identidad del creador de ILOVEYOU, fue que Onel de Guzmán ya tenía cierta reputación en su país por haber creado anteriormente un virus informático como parte de su tesis de grado en la carrera de informática en Manila Computer School. Según se indica, los examinadores reprobaron al alumno por considerar que su trabajo, si bien excelente en lo técnico, estaba desprovisto de toda ética. La misma escuela informa que no ha tenido noticias del joven desde que le reprobara.
En comentarios realizados a la prensa de su país, Onel de Guzman, declaró ayer que Internet debería ser gratuita, intentando luego dar a su nefasta acción una pretendida altura moral, al señalar que su meta fundamental había sido en todo momento ayudar a las personas de escasos recursos a conectarse a Internet. En opinión del acusado Internet es un factor educativo, y debería ser gratuita.
Las autoridades filipinas procesarán judicialmente a de Guzmán por vandalismo deliberado y violación de una ley local sobre acceso a sistemas de telecomunicaciones.
Haciendo gala de un cierto oportunismo político, un parlamentario filipino señaló que ILOVEYOU es un claro ejemplo de genialidad descarriada, agregando en la misma frase Filipinas dispone de vastos recursos en el área de las tecnologías de la información, las que deberían ser explotadas y concentradas en objetivos legítimos, para el beneficio de la patria.