El razonamiento del juez es que al dividir a Microsoft en dos unidades corporativas sólo se estará creando dos nuevos monopolios, luego de lo cual sugirió que sería más adecuado si la división de lectores web (Internet Explorer) y el negocio de servicios de Internet (PSI) también fuesen independientes.
Ante ello, el abogado David Boies, representante del DOJ, indicó que la alternativa de dividir a Microsoft en tres había sido considerada seriamente, pero que se había llegado a la conclusión de que sería una posibilidad demasiado complicada y prolongada, por lo que se prefería dividir a Microsoft en dos.
El juez respondió a lo anterior señalando que la opción elegida por el DOJ es cualquier cosa, menos sencilla de implementar, especialmente a la luz de que Microsoft no sería un participante comedido en su propia división.
La dura posición del juez frente a Microsoft quedó puesta de relieve, una vez más, al señalar que de todas formas será una pesadilla dividir a Microsoft, ya se trate de dos o de tres partes; por lo que el gobierno debería intentar conseguir todo lo que se pueda en el proceso.
Respecto a las alternativas presentadas por Microsoft, los representantes del DOJ y de los estados querellantes indicaron que las propuestas están llenas de puertas de escape y de trampas.
Al concluir la audiencia, el juez pidió al DOJ presentar una propuesta revisada sobre el futuro de Microsoft, esta vez considerando la posibilidad de dividirla en tres.