En los últimos meses ha quedado patente que malware como Stuxnet o Flame están en condiciones de desbaratar infraestructura enemiga sin necesidad de utilizar armas destructivas, como explosivos. Tal realidad adquiere cada vez más relevancia para varias potencias militares, tanto para fines defensivos como ofensivos.
El proyecto balístico de Boeing es denominado CHAMP (Counter-electronics High-powered Advanced Missile Project), y ha sido presentado como un arma con el potencial de modificar el concepto de guerra moderna. El sistema puede desactivar objetivos electrónicos, sin provocar daño colateral en personas ni estructuras.
La prueba fue realizada el 16 octubre en un campo de ensayo situado cerca de la base aérea Hill Air Force Base en el desierto de Western Utah. Para la prueba se colocó dentro de un edificio una serie de PC y equipos electrónicos. El misil CHAMP, que recuerda un misil de crucero, sobrevoló las instalaciones, descargando en ellas una lluvia de potentes microondas. En pocos segundos, todos los equipos electrónicos instalados en el edificio fueron desactivados, incluyendo la cámara utilizada para filmar la prueba desde su interior.
En total, el misil CHAMP alcanzó siete distintos objetivos en el transcurso de una hora. En el futuro próximo, esta tecnología quizás podrá ser utilizada para inutilizar los sistemas electrónicos e informáticos del enemigo, antes de que las primeras tropas o aviones entren en acción declaró Keith Coleman, director del programa CHAMP, en Boeing Phantom Works.
El día de hoy hemos convertido la ciencia ficción en un hecho científico, declaró Coleman.
El contrato de creación de esta arma fue suscrito por Boeing con el gobierno estadounidense en 2009.
Fuente: Boeing.