El recurso legal implica que en Estados Unidos no hay prohibición alguna al streaming comercial de películas en DVD o Blu-ray, siempre y cuando el espectador haya pagado alquiler y el arrendador sea propietario del ejemplar alquilado.
Por USD 1,99 (EUR 1,40), o 10 películas por USD 10 (EUR 7), los interesados pueden alquilar online los estrenos más recientes lanzados en DVD o Blu-ray. Por ese importe, el usuario alquila, en términos jurídicos, la película y el reproductor, de la misma forma que lo haría en una tienda de alquiler de películas.
Sin embargo, Zediva no es una tienda física, sino un servicio online. La empresa no tiene contrato alguno con los estudios cinematográficos, y tampoco tiene intenciones de hacerlo ya que probablemente sería económicamente inviable.
Ley de 1908
La ley en cuestión es denominada Doctrina de la Primera Venta e implica que el propietario de un artículo puede alquilarlo o revenderlo. Claro está, con su data de 1908, la ley fue aprobada mucho antes de conocerse siquiera los DVD o Blu-ray, ni tampoco la distribución online.
En todos los países, las empresas distribuidoras de películas advierten en las carátulas que está prohibido alquilar o vender la película a terceros. Sin embargo, en todo estado de Derecho la ley está por encima de cualquier regla o disposición empresarial. Tal es precisamente el caso de Zediva en Estados Unidos.
La gran ventaja competitiva de Zediva es que puede ofrecer estrenos recientes. La película queda a disposición de los usuarios, vía streaming, por dos semanas completas.
A la hora de publicación de este artículo, Zediva informa en su sitio que el registro de nuevos usuarios está temporalmente suspendido por mantenimiento, para mejorar la capacidad de recibir nuevos clientes.
El modelo de negocios de Zediva, y el resquicio legal que se basa, representa un nuevo reto para la industria cinematográfica. Recientemente, desde Noruega se informaba que en ese país es legal ver películas pirateadas en formato streaming.
Imagen: Zediva.com