Los ingenieros de Microsoft e Intel habrían logrado reducir el consumo eléctrico de Windows 7 en 20% en comparación con Windows Vista. Este ahorro de energía representa una hora extra de uso del PC. Intel ha trabajado estrechamente con Microsoft en el desarrollo el nuevo sistema operativo lanzado el 22 de octubre pasado.
Entre otras cosas, Windows 7 desactiva los componentes de hardware que no están siendo usados por el sistema, a la vez que a algunos circuitos de Intel funcionan en modo suspendido durante todo el tiempo posible.
Windows 7 incluye además un Device Stage que hace posible modificar las preferencias de consumo eléctrico de las unidades conectadas al sistema mediante puertos USB.
Fuente: Intel