El proyecto ha sido denominado Wine que aparte de significar vino, es una abreviatura de WINdows Emulator y es coordinado por el suizo Alexander Jullierd, quien se ha dedicado a la idea durante los últimos cuatro años.
A entender de Jullierd, la gran ventaja de Linux su gratuidad se ve contrarrestada por el hecho de que no es compatible con los programas diseñados para la plataforma Windows. Tal sería la razón de ser del proyecto Wine, que desde ya ha desarrollado excelentes emuladores para algunos juegos diseñados para Windows.
El proyecto ha interesado a Corel Corporation, que ha destinado 6 programadores para la tarea de desarrollar una versión Wine que permita ejecutar Word Perfect y Corel Draw en Linux.
Entrevistado por The New York Times, Jullierd declaró que tenemos lo que se necesita para competir con Microsoft, además de explicar que el descontento con la compañía de Bill Gates es uno de los motores principales del proyecto. Jullierd subrayó esto último al señalar que al igual que la mayoría de los programadores independientes, no me gusta Microsoft en lo absoluto.
En caso de tener éxito el proyecto Wine, podríamos estar frente a un debilitamiento del dominio que Windows posee en el mercado de los sistemas operativos, que a nivel mundial alcanza el 90%.