Aunque en un comienzo la compañía se negaba a entregar a las autoridades policiales la identidad de tales individuos, argumentando que al hacerlo infringiría las leyes de protección de la privacidad, MySpace ha modificado su política y trabaja ahora proactivamente para limpiar su base de clientes de elementos indeseables.
Varias fiscalías estadounidenses han solicitado a MySpace entregar todos los datos personales, incluyendo el domicilio, de delincuentes sexuales convictos que han abierto cuentas en el servicio.