El Wall Street Journal (requiere suscripción) informa que Amazon utilizó un algoritmo confidencial, conocido como Project Nessie, para evaluar metódicamente cuánto podía subir los precios de los productos sin incitar a sus competidores a hacer lo mismo. La revelación tiene su origen en una demanda interpuesta por la Comisión Federal de Comercio (FTC) contra el gigante del comercio electrónico, que le acusa de violar las leyes antimonopolio estadounidenses.
La naturaleza confidencial del Project Nessie se conoció por primera vez el mes pasado, cuando la FTC presentó su denuncia pública. Aunque la sección Nessie de la denuncia estaba muy censurada, el reportaje del Wall Street Journal revela más detalles. Según el informe, el algoritmo subía los precios de Amazon y probaba si otros rivales, como Target, hacían lo mismo. Si los competidores no subían sus precios, Project Nessie estaba diseñado para devolver automáticamente los precios de Amazon a sus niveles habituales.
Según WSJ, el uso de este algoritmo se suspendió en 2019, pero había beneficiado significativamente los márgenes de beneficio de Amazon al inflar artificialmente los precios en diferentes categorías de compras.
Douglas Farrar, portavoz de la FTC, dijo: “Volvemos a instar a Amazon a que revele los textos reservados y permita al público estadounidense ver todo el alcance de sus prácticas monopolísticas supuestamente ilegales”.
Además, Project Nessie no es la única estrategia que la FTC ha identificado en sus denuncias contra el supuesto dominio ilegal del mercado por parte de Amazon. La denuncia presentada en septiembre por la agencia describe numerosas tácticas, como la supresión de listados de productos, que impiden a los vendedores ofrecer precios más bajos en plataformas competidoras. La presidenta de la FTC, Lina Khan, declaró: “La denuncia contiene alegaciones detalladas que muestran cómo Amazon está utilizando ahora su poder monopolístico para enriquecerse mientras sube los precios y degrada el servicio para las decenas de millones de familias estadounidenses que compran en su plataforma y los cientos de miles de empresas que confían en Amazon para llegar a ellas”.
Como se informó el mes pasado, la Comisión Federal de Comercio (FTC), junto con 17 fiscales generales estatales, presentó una demanda contra Amazon.com Inc. alegando que la empresa ha incurrido en prácticas comerciales anticompetitivas en el mercado del comercio electrónico. La demanda busca una orden judicial para poner fin a estas prácticas y pide al tribunal federal que imponga “remedios estructurales”, un término comúnmente utilizado para describir los remedios antimonopolio, como las escisiones. Según la FTC, el comportamiento anticompetitivo de Amazon ha perjudicado a las empresas competidoras de comercio electrónico y a los proveedores de logística, lo que se ha traducido en precios más elevados para los consumidores. Amazon replica que sus prácticas han estimulado la innovación y la competencia en el sector minorista, beneficiando tanto a los consumidores como a las empresas. La denuncia se centra en dos aspectos del negocio de Amazon: su supertienda en línea y sus servicios de mercado, incluida la entrega de paquetes. La FTC acusa a Amazon de utilizar tácticas desleales, como estrategias algorítmicas de fijación de precios y de obligar a los comerciantes en línea a utilizar su servicio logístico Fulfillment by Amazon (FBA).
En respuesta a la demanda de la FTC, Amazon dijo: “La FTC se equivoca en los hechos y se equivoca en la ley, y estamos a la espera de presentar el caso ante los tribunales”.