China consiguió sobrevolar el enorme globo sobre algunas bases militares en múltiples ocasiones y envió la información a Pekín en tiempo real, informó el lunes NBC News, citando a dos altos funcionarios estadounidenses actuales y a un antiguo directivo de alto nivel. El globo, que tenía el tamaño de tres autobuses escolares, voló ocasionalmente en formación de ocho sobre al menos algunos de esos lugares sensibles antes de ser derribado a principios de febrero.
“La información que recogió China procedía principalmente de señales electrónicas, que pueden ser captadas por sistemas de armamento o incluir comunicaciones del personal de la base, y no de imágenes”, según el informe de la NBC.
El lunes, John Kirby, funcionario de la Casa Blanca, declaró a la prensa que no podía confirmar el informe de la NBC, pero afirmó que Estados Unidos limitó la “capacidad del globo de poder recoger algo aditivo”. Añadió que el gobierno estadounidense pudo estudiar y analizar el globo mientras se encontraba en el espacio aéreo de EE.UU., diciendo: “Obtuvimos algún contexto útil”.
El Pentágono declaró que los expertos seguían analizando los restos recogidos del globo tras su derribo el 4 de febrero.
“No pude confirmar que hubiera transmisión en tiempo real desde el globo de vuelta a (China) en este momento”, dijo la portavoz del Pentágono Sabrina Singh, y añadió: “eso es algo que estamos analizando ahora mismo”.
El gobierno chino ha negado rotundamente que el globo fuera un activo gubernamental de recogida de información, alegando que Estados Unidos reaccionó de forma exagerada ante lo que era una nave civil no tripulada que se había desviado accidentalmente de su rumbo.
Una vez que se hizo pública la existencia del globo, se siguió de cerca su vuelo mientras planeaba desde Alaska hasta Montana, donde el Departamento de Defensa estadounidense almacena algunos activos nucleares en la base aérea de Malmstrom. Según los funcionarios citados por la NBC, el globo aceleró cuando China intentó sacarlo del espacio aéreo estadounidense lo antes posible.
Los funcionarios dijeron que el gobierno de Biden había limitado los esfuerzos de China para obtener información de lugares sensibles desplazando los objetivos potenciales y bloqueando la capacidad del globo para captar y transmitir señales electrónicas.
El globo pasó una semana sobrevolando Norteamérica antes de que un avión de guerra estadounidense lo derribara sobre el océano Atlántico, frente a la costa de Carolina del Sur, el 4 de febrero.
Los restos todavía están siendo analizados por expertos en seguridad estadounidenses. China ha desplegado globos similares para recabar información sobre 40 países de los cinco continentes, según ha afirmado el gobierno estadounidense.
Días después de que un artefacto similar fuese derribado por Estados Unidos, la fuerza aérea colombiana informó que “un objeto” con “características similares a las de un globo” fue detectado y monitoreado “hasta que abandonó el espacio aéreo”.
El ministerio chino de Relaciones Exteriores explicó que el objeto era “de naturaleza civil y usado para pruebas de vuelo” y que debido a “las fuerzas meteorológicas y de su maniobrabilidad limitada se desvió seriamente de su ruta programada” y se dirigió “accidentalmente hacia América Latina y el Caribe”.