Lusi Zheng, Senior Director, Gartner Supply Chain, escribe en el blog de la empresa que el 74% de los directores financieros considera que la inflación amenaza la rentabilidad de sus empresa, y que estas preocupaciones afectan a las cadenas de suministro.
En su artículo, Zheng explora varias estrategias de reducción de costes y de mejora de los márgenes en toda la cadena de suministro. “Las cadenas de suministro se están centrando en la calidad para impulsar la rentabilidad. No se trata de abaratar los insumos, sino de eliminar las pérdidas derivadas de la baja calidad”, escribe el analista.
Por término medio, las empresas pierden 260 millones de dólares por cada 10.000 millones de dólares de ingresos debido al coste de la mala calidad (COPQ). Los programas de mitigación de esta pérdida han permitido a las organizaciones recortar costes y reducir el riesgo de la calidad del producto o servicio. Según Zheng, algunas organizaciones han visto reducido su coste de la mala calidad en puntos porcentuales de dos dígitos, lo que representaría millones de dólares de ahorro, aparte de ser conducente a la mejora de los niveles de servicio al cliente, la precisión de las previsiones y el inventario, por nombrar algunos resultados.
A juicio del analista de Gartner, muchos confunden el coste de la calidad con una métrica, cuando en realidad el coste de la calidad aumenta la transparencia de los costosos problemas de calidad y ayuda a las cadenas de suministro a identificar y priorizar las posibilidades de mejora.
“El coste de la mala calidad y el coste global de la calidad son modelos típicos”, observa Zheng, acotando que los modelos de mala calidad tienen un coste interno y externo. “Los costes de los fallos internos se producen antes de que se envíe el producto. Los costes de los fallos externos se producen después de la venta del producto. No queremos despilfarrar estos costes de fracaso”, señala el ejecutivo.
Zheng recomienda a los líderes de la cadena de suministro medir y mejorar el coste de la mala calidad para así obtener cuantiosos ahorros. “Los líderes deben identificar las categorías de costes más significativas, señalar los principales impulsores de los costes por grupo empresarial y mejorar los procesos”, sugiere el analista.
“El coste de la mala calidad no puede ser gestionado sólo por la cadena de suministro. Las organizaciones que han visto los mayores ahorros han contado con equipos multifuncionales. Asóciese con sus líderes de calidad y finanzas para averiguar lo que ya están haciendo. Deje de quemar dinero y empiece a ahorrar, concluye señalando Lusi Zheng, Senior Director, Gartner Supply Chain.
