Un nuevo estudio de Accenture muestra que la mayoría de las empresas ha pivotado hacia un enfoque híbrido (78%) en respuesta a la necesidad de un enfoque más equilibrado. Además, se espera que más del 90% de las organizaciones optará por arquitecturas multicloud para evitar una dependencia excesiva de un único proveedor de nube pública.
Matías Arturo, director ejecutivo de Accenture, explicó que “cada vez está más claro que la nube pública no es adecuada para todas las cargas de trabajo, ya que está limitada por retos comerciales (por ejemplo, modelos de licencia que hacen que no sea rentable migrar completamente a un hiperescalador); retos técnicos, como la latencia y el rendimiento para cargas de trabajo muy específicas; gravedad/velocidad de los datos; restricciones de soberanía/; escenarios de despliegue de borde que requieren infraestructura descentralizada; y, en algunos casos, requisitos de continuidad del negocio”.
El ejecutivo de Accenture agregó que “en ese contexto, los modelos de nube híbrida suelen ser la mejor opción para responder a todos los requisitos empresariales. Por ejemplo, las organizaciones pueden recurrir a la nube privada o incluso un centro de datos local para cumplir con los requisitos normativos y de cumplimiento”.
El estudio de Accenture identifica cinco pasos clave para que las empresas puedan impulsar una estrategia de cloud híbrida exitosa.
El primero es definir los entornos de destino correctos y seleccionar el objetivo adecuado para cada una de sus aplicaciones denominadas “landing zones”. ¿Qué significa esto en la práctica? La arquitectura a tres años de una empresa puede ser diferente al mirar a seis años. Por ejemplo, las organizaciones con grandes entornos ERP legados que necesitan ser reemplazados saben que esto llevará tiempo. Por tanto, las aplicaciones pueden estar en la arquitectura objetivo de tres años, pero no en la de seis años.
El segundo paso clave es forjar una arquitectura híbrida. Matías Arturo explicó que “para esto, se debe impulsar una integración en tres niveles. Primero, la tecnología. Esto significa desarrollar una capa de integración en todas las landing zone. Segundo, los procesos. Alinear e integrar procesos, por ejemplo, la armonización del aprovisionamiento y la supervisión. En tercer lugar, las personas. Los conocimientos necesarios para diseñar, operar y optimizar deben estar disponibles -desarrolladas o adquiridas-, y reunidas en toda la empresa. La integración de estas tres áreas permite a las organizaciones optimizar dinámicamente el precio, rendimiento y los requisitos para objetivos empresariales estratégicos”.
Una vez que las empresas han identificado las landing zones adecuadas y hayan planificado la arquitectura integrada para cumplir esos requisitos, deben crear un plano de control para gestionar la arquitectura híbrida multi-nube. Para esto es necesario un enfoque holístico, es decir, una pila de herramientas y procesos, para gestionar el continuo de la nube, orquestar el cambio e impulsar la innovación. De esa forma, los desarrolladores y operadores pueden automatizar tareas y flujos de trabajo a escala, independientemente de la ubicación, al reunir nuevos procesos y un conjunto de herramientas mejor integradas, habilitadas a través de nuevas plataformas y la automatización.
Matías Arturo explicó que “un plano de control continuo ayuda a las organizaciones a adoptar nuevas prácticas y modelos operativos, dándoles los medios y la disciplina para innovar rápidamente y apoyar una cultura de reinvención continua. Permite a las empresas equilibrar su necesidad de estabilidad operativa y financiera con su necesidad de rápida innovación y agilidad”.
El cuarto paso clave es definir una hoja de ruta. Las empresas deben decidir cómo organizar la migración a las landing zones optimizadas. Sinagra resaltó que “en algunos casos, tiene sentido considerar familias de aplicaciones juntas, por ejemplo, si un proceso de negocio abarca tres aplicaciones. En ocasiones, una nueva oferta de software como servicio puede sustituir a varias aplicaciones más pequeñas. En otras, puede ser más rentable replantear un proceso empresarial en lugar de personalizar una solución para que se adapte a un proceso existente. También es importante considerar el modelo operativo”.
El quinto paso es avanzar hacia el Cloud Continuum. Una vez que las empresas han alcanzado su estado objetivo, pueden aprovechar continuamente las nuevas innovaciones de múltiples proveedores de nubes privadas y públicas. Esto significa rediseñar constantemente la infraestructura para mantener la alineación con el negocio, a medida que los objetivos estratégicos evolucionan y se introduzcan nuevas tecnologías.
Matías Arturo concluyó que “cada vez más organizaciones reconocen que las arquitecturas híbridas son la opción adecuada para sus diversas necesidades empresariales de hoy y de mañana. Con una estrategia adecuada, las empresas se mantendrán seguras y ágiles”.
El informe completdo (documento PDF de 24 páginas en inglés) está disponible en este enlace. No requiere registro.