La nube, dice Gartner, va a ser la pieza central de las nuevas experiencias digitales. Para las empresas, esto significa que “ha llegado el momento de adoptar un enfoque que dé prioridad a la nube, o de arriesgarse a languidecer en un centro de datos local”.
Los cambios que se vislumbran en el horizonte supondrán grandes cambios en la forma de hacer negocios en los próximos años, indica Gartner, a cuyo juicio más del 85% de las organizaciones adoptarán una estrategia de “cloud-first” para 2025, a la vez que el 95% de las nuevas cargas de trabajo digitales serán ejecutadas en plataformas nativas de la nube. Este porcentaje representa un fuerte incremento respecto del 30% previsto para 2021.
Milind Govekar, vicepresidente de investigación de Gartner, afirmó que la estrategia empresarial y la estrategia en la nube serán inseparables en un futuro próximo, lo que quedó patente durante la pandemia de COVID-19. “La nube fue capaz de demostrar que se puede seguir dirigiendo el negocio a nivel global, durante una pandemia con los mínimos fallos, cuando los empleados tienen que pasar a trabajar desde casa prácticamente de la noche a la mañana”, dijo el ejecutivo.
Junto con el cambio en los tipos de infraestructura que utilizan las empresas, el cambio también afectará a los equipos y profesionales de TI debido a los cambios en los modelos de negocio que “pasarán a un modelo operativo orientado a los productos, en el que todo el flujo de valor de la empresa y de TI tendrá que estar alineado por productos”, señala el analista de Gartner. Esto significa que se crearán nuevas funciones y responsabilidades, mientras que otras pueden desaparecer.
A medida que el mundo de los negocios gira hacia un futuro basado en productos, también las aplicaciones pasarán del desarrollo a gran escala al “ensamblaje e integración de aplicaciones”, dijo Gartner. Con esto, la consultora prevé que las aplicaciones serán compuestas y compiladas por los equipos que las utilicen, y no necesariamente por los desarrolladores, lo que significa que las instancias con código reducido, o derechamente ausencia de código, crecerán considerablemente en los próximos años. “Para 2025, el 70% de las nuevas aplicaciones desarrolladas por las organizaciones utilizarán tecnologías de bajo código o sin código, frente a menos del 25% en 2020”, señala el informe. “El bajo código y el no código serán un multiplicador de fuerza para acomodar las habilidades digitales que tienen los tecnólogos de las empresas”, dijo Govekar.
Paralelamente, secure access service edge, o SASE, crecerá hasta convertirse en un servicio indispensable para las empresas, especialmente las que tienen múltiples ubicaciones o equipos en el terreno. Para 2022, Gartner predice que el gasto en SASE de los usuarios finales alcanzará los 6.800 millones de dólares, frente a los 4.800 millones de dólares de 2021. Gartner también predice que más del 50% de las empresas tendrán estrategias de adopción de SASE en 2025, frente a menos del 5% en 2020.
Más información en el sitio de Gartner.