En la actualidad, muchas de las pequeñas y medianas empresas (Pymes) se enfrentan al reto de reducir su factura energética. Por ello, disminuir la potencia contratada, apostar por los focos LED o instalar baterías de condensadores, son algunas de las medidas que pueden ayudar a estas empresas a frenar el exceso de gasto eléctrico.
Para que una Pyme reduzca su consumo de energía, la primera medida y a veces a la que menos atención se le presta, es la concientización. Es necesario entender que la energía, al igual que cualquier otra materia prima, hay que gestionarla y controlarla. Después, hay que pasar a la acción. La tendencia en pequeñas y medianas empresas cada vez más es externalizar la gestión energética a empresas especialistas.
De esta forma, cuando se realiza una asesoría energética a una empresa del entorno industrial, los puntos clave a revisar e implementar son la generación de calor (calderas) y frío (refrigeradores); la iluminación (LED), el aire comprimido y la automatización de la gestión.
Una Pyme puede llevar a cabo una gran variedad de gastos sin necesidad de realizar una inversión económica importante, por ejemplo, cambiar las consignas de temperatura en función de la estación (invierno-verano). Además, un buen mantenimiento de las instalaciones —que no genera un mayor costo— es básico para asegurar su eficiencia. También es fundamental la automatización de las instalaciones.
Otro punto importante que debe considerarse es el adecuado control de la energía activa. En las instalaciones hay una serie de receptores con cargas inductivas como motores que necesitan campos magnéticos para funcionar. Estos campos se generan consumiendo energía reactiva, pero estos receptores revierten la energía reactiva a la red provocando efectos adversos, como la disminución de la energía activa y perturbaciones en la red. Por ello, controlar su consumo evitará fallos en la instalación eléctrica lo que podría suponer un aumento en el costo de la factura eléctrica.
Finalmente, no debe olvidarse que en el mercado existen diferentes equipos o sistemas de control que ayudan a evitar la pérdida de la energía reactiva. Principalmente resultan de ayuda las baterías de condensadores porque se adecuan a la necesidad de cada instalación en tiempo real y, al mismo tiempo, aportan la energía reactiva necesaria en todo momento. Se trata de una automatización que se regula en función de la información que recibe de sus sensores.
Actualmente lo más importante es fomentar una cultura de ahorro de energía entre las Pymes para alcanzar un desarrollo sustentable en México, y esto se puede lograr a través de un sistema de gestión de la energía. Schneider Electric ofrece servicios y soluciones para la compensación de la energía reactiva, además de una amplia gama de productos para la corrección del factor de potencia.
Por Felipe Rivera, director de Automatización de Procesos en Schneider Electric México
