Hasta ahora, Symantec ha sido el tercer proveedor de SSL más grande del mercado después de Comodo e IdenTrust, con una cuota de mercado del 14% y sus certificados SSL instalados en el 5,5% de los dominios de Internet.
DigiCert ocupa el sexto lugar con una cuota de mercado del 2,2% y certificados en el 0,9% de los sitios de Internet. No obstante lo anterior, DigiCert tiene una presencia más fuerte en el mercado IoT, donde sus certificados SSL son a menudo utilizados para cifrar el tráfico entre dispositivos inteligentes y servidores de proveedores.
Según Reuters, los primeros rumores sobre las intenciones de Symantec de abandonar el negocio SSL surgieron hace tres semanas. La decisión de vender es atribuida directamente a una serie de sanciones que Google se preparaba para aplicar a los certificados SSL de Symantec.
Para finales de 2018, Google planeaba dejar de aceptar todos los certificados SSL emitidos alguna vez por Symantec; en otras palabras, una declaración de pérdida absoluta de confianza. Google estaba penalizando a Symantec luego de haber descubierto que la compañía había emitido erróneamente más de 30.000 certificados SSL. De nada sirvieron las explicaciones de Symantec, en el sentido que el número de certificados habría sido poco más de un centenar, junto con acusar a Google de actuar de manera irresponsable.
Como una solución que diera a Symantec la posibilidad de permanecer en el mercado de emisión de SSL, Google le propuso emitir certificados bajo la marca Symantec, pero a través de otro proveedor SSL a partir del 1 de diciembre de 2017.
Otra alternativa para Symantec habría sido reiniciar, desde cero, su negocio de emisión de SSL. El reto de recuperar la confianza, o la posibilidad de reorganizarse, no han tenido efecto alguno en la gerencia de Symantec, que prefirió simplemente cobrar y cerrar.