Steve Jobs es a menudo retratado por los medios de comunicación como el gran redentor TI, humanista y simpático, mientras que Bill Gates es visto como un especulador capitalista e inconciente. En realidad, es todo lo contrario, comenta Leander Kahney de Cult of Mac.
Según Kahney, la antigua campaña Think Different, que presentaba retratos de grandes personalidades históricas como Ghandi y John Lennon, fue única y exclusivamente un aprovechamiento inescrupuloso y capitalista de los mismos. Jobs estuvo únicamente motivado por el lucro, y esto lo convierte en un capitalista codicioso y nada más, explica Kahney.
Aparte de su simpatía declarada por el Partido Demócrata de Estados Unidos, Jobs nunca ha usado dinero para las grandes causas sociales y humanitarias, si el fin no ha sido el lucro.
En tal sentido, Jobs contrasta diametralmente con Bill Gates, cuya reputación de capitalista codicioso es mucho peor que la de Jobs. A juicio de Kahney, la realidad es inversa, debido a que Bill Gates dedica importantes recursos de su patrimonio personal para causas humanitarias en todo el mundo.