Sony recalca que aún no ha decidido que el sistema operativo instalará en su próxima consola para juegos.
Anteriormente se ha sugerido que Sony optará por una variante de Linux, debido en parte a que de esa forma Sony no se verá en la necesidad de pagar a Microsoft u otro actor por concepto de licencias.
Por otra parte, hay pocas dudas de que Apple y Sony son cada vez mejores amigos. Ambas compañías iniciaron recientemente un amplio acuerdo de cooperación sobre productos profesionales del ámbito multimedia, y a juicio de algunos observadores Sony abandonará totalmente su formato ATRAC para la descarga de música y en lugar de ello adoptará la plataforma iTunes.
Esto ocurre en momentos en que las relaciones entre Microsoft y Sony son algo tensas. Sony ha sugerido que no está dispuesta a pagar licencias por el software que se necesita para ejecutar sus cada vez más avanzados productos de electrónica de consumo. Fue precisamente tal situación que llevó a Sony, junto con otros fabricantes asiáticos, a desarrollar el procesador Cell, que no es compatible con Windows.
En el comunicado de Sony se indica además que PS3 será distribuido con discos duros de 80 y 120 GB, respectivamente.
