Alloy ofrece un conjunto de experiencias nuevas e inmersivas gracias a las tecnologías RealSense de Intel optimizadas para usos de realidad virtual, que incluyen:
Va desconectado: Operación sin cables colgados en el headset VR y conectados a la PC. La potencia de cálculo se encuentra en el Alloy Head-Mounted Device (HMD), que permite al usuario experimentar la realidad virtual sin cables. Eso significa que el usuario puede “cortar el cordón VR”, permitiendo libre movimiento con 6 grados de libertad en un gran espacio. Esto, combinado con la detección y evitación de colisiones, permite al usuario hacer movimientos físicos para explorar un espacio virtual.
Experiencias immersivas: A través de la realidad combinada, el usuario puede ver sus manos, a sus amigos, la pared con que está a punto de chocar, etc. Con la tecnología Intel RealSense, no sólo es posible ver estos elementos del mundo real, sino también utilizar las manos para interactuar con ellos en su mundo virtual, mezclando realidades.
Sin sensores externos: La realidad combinada de Alloy es posible usando las cámaras Intel RealSense conectadas al headset y no depende de la configuración de cualquier sensor externo o cámara alrededor de la habitación.
Disponible para producir su propia experiencia: El Alloy HMD es un ejemplo de cómo el conjunto de sensores y tecnologías de Intel, como la tecnología Intel RealSense, se hacen disponibles a desarrolladores, fabricantes e inventores para proporcionar futuras experiencias inmersivas. Además, Intel está colaborando con Microsoft para optimizar los contenidos y experiencias basados en Windows en dispositivos de realidad virtual basados en soluciones de realidad virtual de Intel, como el Alloy.
Intel abrirá el hardware Alloy y ofrecerá APIs abiertas para el ecosistema en 2017, permitiendo a los desarrolladores y socios crear sus propios productos de marca a partir del diseño de Alloy.