En un comunicado, la compañía informó el 9 de septiembre que las existencias de Fire Phone se han agotado, pero que no hay planes de manufacturar nuevos aparatos. La página del producto en el sitio de Amazon simplemente muestra la notificación “no disponible”.
En sus 14 meses de existencia, el Fire Phone nunca consiguió atraer las preferencias de los usuarios, principalmente por el precio de adquisición y modelo de tarifas. Así, el aparato era despachado por US$650 sin contrato, y por US$200 con una suscripción por dos años.
También se criticó el desempeño técnico del aparato, con un deficiente rendimiento de la batería y capacidad de procesamiento débil en relación con otros modelos comparables. Otras criticas apuntaron a una supuesta amenaza a la privacidad, debido a las características intrínsecas del aparato.
La intención de Amazon era atraer usuarios con la denominada “perspectiva dinámica”, para simulación de imágenes tridimensionales adaptadas a los movimientos del usuario. Otra función destacada por Amazon era Firefly, que no sólo permitía a la cámara reconocer diversos objetos físicos, sino también canciones, espectáculos de televisión, números telefónicos, información impresa y códigos QR. La intención subyacente de Amazon era atraer usuarios su portal de comercio electrónico. Ninguna de estas dos funciones despertó mayor interés entre los consumidores.
La empresa informa que los propietarios de teléfonos Fire Phone continuarán recibiendo soporte durante la vida útil de los aparatos.