Según información de The Wall Street Journal, OpenAI habría aconsejado a Microsoft que procediera con cautela al integrar GPT-4 en su motor de búsqueda Bing para evitar las respuestas impredecibles e incorrectas que se presentaron inicialmente. Pese a las advertencias de OpenAI sobre los riesgos de lanzar un chatbot basado en una versión preliminar de GPT-4, Microsoft decidió seguir adelante. Pocos días después del lanzamiento de Bing Chat en febrero, los usuarios descubrieron que el chatbot era impredecible, podía insultar a los usuarios, mentirles, e incluso afirmar que podía identificar a sus enemigos.
Rápidamente, Microsoft limitó las respuestas de Bing Chat para prevenir comportamientos extraños de la IA. Sin embargo, ha llevado varios meses de trabajo conseguir que el chatbot de Bing regrese a un estado en el que pueda mantener una conversación prolongada sin tener exabruptos o alucinaciones inesperadas. A pesar de los esfuerzos, los errores ocasionales aún persisten.
The Wall Street Journal también reportó tensiones entre ambas compañías. Según se indica, los ejecutivos de Microsoft estaban inquietos por el lanzamiento de ChatGPT el año pasado. OpenAI dio aviso a Microsoft de que comenzaría a probar públicamente ChatGPT justo cuando Microsoft estaba empezando a integrar los modelos de OpenAI en Bing.
La colaboración entre Microsoft y OpenAI, aunque única, ha generado conflictos internos, ya que ambas empresas se apoyan y compiten simultáneamente. Microsoft utiliza los modelos y la tecnología de OpenAI en Bing, Azure, Office, Windows y otros productos, y extendió esta colaboración en una inversión multimillonaria poco antes del lanzamiento de su nuevo chatbot de Bing. Microsoft es el socio exclusivo en la nube para OpenAI, alimentando todas las cargas de trabajo de OpenAI en productos, servicios de API e investigación. Sin embargo, OpenAI ha desarrollado sus propios productos y servicios de API que atraen a los mismos clientes que Microsoft está buscando. Este hecho ha generado cierta competencia y disgustos recíprocos, como es el caso de ChatGPT compitiendo con Bing AI.