El fundador y propietario del otrora famoso y popular sitio de intercambio Megaupload, está en libertad condicional, después de haber sido detenido en enero pasado junto a varios de sus socios y colaboradores o, en opinión de la policía, cómplices.
La detención de Schmitz se produjo como resultado de un exhorto enviado a Nueva Zelandia por las autoridades estadounidenses, que a su vez actuaron accediendo a una petición de la industria cinematográfica local.
La piratería de productos físicos e inmateriales es considerada en Estados Unidos como uno de los principales problemas económicos que el país enfrenta. Según las industrias cinematográfica y discográfica, la piratería de música y películas está socavando su modelo de negocios. Por su parte, los ciberactivistas acusan a las autoridades y a la industria del entretenimiento de socavar la libertad digital, convirtiendo Internet en un espacio férreamente controlado y censurado.
En el siguiente video, Kim Dotcom critica fuertemente a las autoridades estadounidenses que, a su entender, son simples marionetas de Hollywood. La crítica ha sido formulada en forma de canción, cuyo texto es inequívoco.
Hollywood controla la política y el gobierno está matando la innovación, canta Schmitz, instando a la audiencia a no permitir tal situación, y levantarse y luchar.
Por absurdo y desvergonzado que parezca, Schmitz se compara con Martin Luther King, activista que cumplió una labor crucial e histórica al frente del movimiento por los derechos civiles para los afroamericanos en Estados Unidos, y que terminó siendo asesinado a los 39 años de edad en Memphis, el 4 de abril de 1968. Schmitz, al son de su música techno, dice Tengo un sueño, al igual que el Dr. King. Refiriéndose a la célebre frase Tengo un sueño, Wikipedia escribe que es el título del histórico discurso de Martin Luther King, gracias al cual se extendió en Estados Unidos la conciencia pública sobre el movimiento de los derechos civiles y que le consolidaría como uno de los mayores oradores de la historia estadounidense.
Schmitz continúa su canción presentándose como un defensor de la libertad de expresión, mientras en pantalla se ven escenas de represión, brutalidad policial e incluso la explosión de una bomba atómica. A juicio de Schmitz, las autoridades han convertido la innovación en un crimen.
Antes de la acción policial que resultó en la clausura de Megaupload, Kim Dotcom Schmitz, alemán radicado en Nueva Zelanda, logró amasar una fortuna con su sitio, que era principalmente utilizado para el intercambio de material pirateado. Schmitz gustaba hacer alarde de su fortuna, posando junto a coches exclusivos, portando armas, sentado en aviones privados, frente a su fabulosa mansión o en un jacuzzi rodeado de hermosas mujeres en bikini.