Esta nueva estrategia de IBM propone integrar los procesos de negocios de las empresas de manera transversal y a través de la red, de forma tal que las compañías respondan con flexibilidad y velocidad a cualquier demanda de los clientes, proveedores, empleados, así como a las oportunidades de mercado o amenazas externas.
IBM está movilizando todos sus recursos para ayudar a los clientes a transformar sus negocios en empresas ´a pedido´. Para ello, la multinacional está realizando inversiones superiores a los US$10.000 millones, adquisiciones e iniciativas comerciales emergentes y la apertura en todo el mundo de ´On demand Design Centers´, que ayudarán a los clientes a implementar rápidamente proyectos pilotos que utilicen tecnologías abiertas, Servicios Web, el sistema operativo Linux y Grid Computing. Además, con la reciente adquisición de Price WaterHouse Consulting por U$S 3.500 millones y la formación de la nueva unidad de negocios Business Consulting Services, IBM cuenta con los profesionales de consultoría más capacitados del mercado para ayudar a las empresas a comenzar su transformación hacia la era ´on demand´.
Con la adopción de e-business on demand surgen ventajas competitivas altamente diferenciadoras para las empresas, entre ellas, la flexibilidad -que permite reaccionar en forma ágil y eficiente a un entorno altamente cambiante-; la variabilidad -que propone el traslado de procesos y costos fijos a variables-; la elasticidad -que plantea la capacidad de volver rápidamente al estado inicial ante una agresión externa (como un virus informático o un terremoto) una vez concluido el impacto- y, la focalización -que se refiere a que la empresa debe dirigir toda su energía, recursos y capacidad a su core business y tercerizar toda actividad que no le entregue valor agregado-.
Carmen Rosa Graham, Gerente Gereral de IBM del Perú y Bolivia, señaló: ´La capacidad de una empresa para convertirse en un negocio on demand, respondiendo en tiempo real a las condiciones evolutivas del mercado global, determinará el exito de las empresas y – aún más – su subsistencia en la próxima década´.
En el mundo interconectado de hoy, se hace imprescindible que las compañías evolucionen en concordancia con los complejos y heterogéneos requerimientos actuales, es decir, que estén comprometidas con la demanda en el más amplio sentido de la palabra. Esto implica específicamente realizar una transformación en sus modelos de negocios a través de la integración con clientes, proveedores, empleados y con la comunidad. Es decir, convertirse en una empresa on demand, lo cual representa un cambio fundamental en la estructura empresarial, en su visión y cultura, basándose en nuevos y profundos niveles de integración horizontal.
Hacia un entorno on demand
Si Internet se ha convertido en un vehículo natural de transacciones, colaboración y comunicaciones, el siguiente paso es conectarse a sus herramientas y servicios según las necesidades específicas y pagar únicamente por los servicios utilizados. Así, a través de la estrategia on demand de IBM los clientes no requieren financiar los altos costos iniciales ni tomar decisiones de infraestructura importantes, lo cual ayuda a acelerar el rendimiento de la inversión, al mismo tiempo que se reducen los riesgos tecnológicos. Asimismo, los flujos de fondos y costos son más fáciles de administrar, dada la existencia de pagos mensuales predecibles o precios basados en el consumo.
Un paso inicial ha sido el de la tercerización o Outsourcing, en el cual un cliente traspasa la administración de su departamento de IT -tanto equipamiento como recursos humanos- a un proveedor. Ello posibilita a la empresa reducir costos, tener acceso a capacidades profesionales de tecnología y a una permanente renovación de la plataforma tecnológica, además de permitirle la concentración específica en su negocio. Actualmente la tercerización on demand – denominada e-sourcing – permite adicionalmente la provisión de procesos, aplicaciones e infraestructura estandarizados a través de la red como un servicio, con funcionalidad tanto de negocios como de tecnología informática.
Para concretar este nuevo modelo de negocios en términos de reducción de costos, retorno sobre la inversión, mayores eficiencias, costos variables y capacidad de reacción frente a las demandas, es necesario contar con una estrategia de negocios soportada por un entorno tecnológico y operativo adecuado. En este sentido, la tecnología toma un rol estratégico en la materialización de la transformación sobre la base de cuatro criterios claves: debe ser una infraestructura integrada, soportada por estándares abiertos que permitan que los diferentes ambientes y aplicaciones se comuniquen entre sí, facilitando las operaciones dentro de la compañía. Además, debe ser virtualizada de manera de optimizar el uso de la capacidad de computación ociosa y -finalmente- autonómica, de manera de sobrellevar las altas complejidades tecnológicas a través de equipos, productos y entornos que puedan autodiagnosticarse, autocorregirse y autoprotegerse.
Pensar en un negocio on demand requiere contar con infraestructura que le posibilite serlo. En este contexto, los servicios de IT se convierten en verdaderos utility, pudiendo ser utilizados sólo cuando se necesiten y en la cantidad que se desee, pagando por ellos un valor acorde únicamente al tiempo de uso y capacidad requerida. De esta manera, la empresa responde a las demandas externas, adecuando sus propias demandas de servicios, recursos, procesos, infraestructura, etc. IBM es la única compañía de tecnología capaz de hacer funcionar un entorno operativo on demand, haciendo posible que los equipos de computación y los procesos de negocios que ellos soportan, se integren y trabajen en conjunto.
´e-business on demand´ será considerado en el futuro como un modelo de negocios que cambió la historia del mercado y de las industrias.