Según un vocero judicial estadounidense, un sujeto de 30 años habría confesado haber creado el virus Melissa, que causó estragos hace algunos meses en todo el mundo, para desesperación de muchos usuarios de correo electrónico y para lucro, sin duda alguna, de las compañías fabricantes de programas antivirus.
El creador de Melissa fue detenido en abril, bajo cargos de haber saboteado sistemas públicos de comunicación. Al poco tiempo fue liberado previo pago de una fianza de 100.000 dólares.
Ahora corresponde a un tribunal de instrucción decidir si el sujeto será sometido a proceso o no. En caso de ser juzgado y condenado, la ley contempla condenas de prisión por un máximo de 40 años y al pago de indemnizaciones del orden de los 500.000 dólares.