Carter, quien junto a su esposa Rosalyn preside la fundación de beneficencia internacional Centro Carter, destacó las grandes posibilidades que el sector informático tiene, en los actuales tiempos de bonanza, para contribuir al desarrollo de sectores pobres del mundo.
Una vez concluido el discurso de Carter, realizado en Nueva Orleans a iniciativa de Computer Associates, su director, Charles Wang, tomó la palabra para asegurar a Carter que su fundación recibiría dentro de poco todo el software que necesite para su labor humanitaria.