Según versiones extraoficiales, ambas compañías habían estado trabajando juntas en x86-64, la arquitectura para los procesadores Hammer de AMD. Supuestamente, AMD estaba teniendo problemas de emulación y pidió a Transmeta que le ayudara.
Transmeta estuvo ayudando a AMD a implementar su tecnología code-morphing para obtener un x86-64 rápido y con compatibilidad total con las aplicaciones de 32 bits.
Mediante el acuerdo, Transmeta tendrá derechos a usar x86-64 lo que le allanará el camino para ofrecer chips compatibles con Hammer que, combinados con la tecnología de conservación de la compañía, le permitirá tener como objetivo el mercado de los servidores.
Estamos muy complacidos de que Transmeta haya escogido respaldar y adoptar esta tecnología, declaró un portavoz de AMD.