MADRID: Con ello, el proyecto de ley queda en entredicho y deberá ser reformulado antes de poder ser sometido nuevamente a consideración de los legisladores.
La principal oposición a la ley ha sido planteada por los representantes de Polonia, aunque también Dinamarca ha expresado escepticismo.
El proyecto de ley fue presentado a instancias de grandes compañías estadounidenses con oficinas en Europa; principalmente el gigante Microsoft.
Por otra parte, la industria europea del software era principalmente de la opinión de que una armonización con la legislación europea de patentes frenaría la innovación.
De igual modo, preocupaba a los fabricantes europeos que la ley hiciera posible no sólo patentar el software sino también conceptos, fenómenos e ideas comerciales, escribe BBC.
Durante los últimos años se han visto reiterados ejemplos de compañías que han intentado patentar diversos elementos, que van desde el comercio electrónico a los enlaces de hipertexto. Para alivio de la mayoría, tales aspiraciones han sido infructuosas.
El rechazo comunitario al proyecto de ley no implica necesariamente el fin del mismo. La mayoría de los países comunitarios aprueban sus planteamientos generales. Según expertos consultados por BBC, sólo será necesario hacer pequeños ajustes para que pueda ser aprobada por la UE en su conjunto.