SANTIAGO: La compañía Markland ha presentado un nuevo tipo de antenas de gas y plasma combinados, que dificultan en gran medida el hacking inalámbrico.
Según Markland, la orientación direccional de las antenas de gas-plasma puede ser determinada con gran precisión. Asimismo, pueden cambiar de posición y ancho de banda con gran rapidez, haciendo difícil para eventuales intrusos mantener el ritmo de cambios.
Las estaciones base y antenas tradicionales son estáticas, y relativamente vulnerables cuando un intruso ha logrado eludir la seguridad.
Con las antenas de gas-plasma, los parámetros físicos son cambiados constantemente, de forma que los intrusos nunca cuentan con el tiempo suficiente para analizar la red y detectar sus vulnerabilidades, escribe la compañía.
Mayor información en el sitio de Marklandtech.com.