La compañía holandesa Philips es titular de los derechos de la patente de la tecnología CD-R. Como tal, ahora intenta conseguir que los fabricantes de CD continúen pagando licencias mediante una reducción del 50% de sus derechos de uso de licencias.
Paralelamente, la compañía ha instaurado un nuevo certificado de autenticidad que facilitará el reconocimiento de discos carentes de licencia.
El nuevo sistema de licencias, denominado Veeza, será más sencillo y transparente que el procedimiento anterior. En concreto, Philips exige ahora el pago de 0,025 dólares por cada disco CD-R, contra un precio anterior de 0,050.
Con todo, los fabricantes deben continuar pagando a Philips un cargo único de 25.000 dólares para poder fabricar CD-R auténticos.
Philips participó en el desarrollo de CD-R y es propietaria de una serie de patentes de esa tecnología. La compañía también es titular de patentes de DVD-RW y de la nueva tecnología Blu-ray.
Desde su fundación, Philips ha registrado más de 115.000 patentes.