MADRID: La Universidad de Salamanca abordará el estudio del diseño de los nuevos nanodispositivos electrónicos de alta frecuencia implicados en las comunicaciones ópticas, láseres o la telefonía móvil gracias a la reciente creación de un laboratorio de bajas temperaturas, según ha informado el vicerrector de Investigación, Arturo Pérez Eslava.
Con esta iniciativa, la institución académica salmantina se convierte en la primera y única institución de Castilla y León en poseer un laboratorio de estas características. Su actividad se centrará, por un lado, en el estudio de los efectos cuánticos de nuevos materiales para el desarrollo de nuevas tecnologías I+D+i en el ámbito sanitario, de las telecomunicaciones o la nanoelectrónica, y por otro, en el avance de la investigación de la ciencia básica de ésta área.
La instalación y actividades del laboratorio de bajas temperaturas de la Universidad de Salamanca está estructurada en tres fases. La última de ellas se efectuará en el período de años comprendido entre 2006-2008 y el equipamiento que se espera disponer para entonces permitirá desarrollar investigaciones en condiciones de temperatura cercanos al cero absoluto.