SCO informa que el envío de facturas es una medida legítima, que busca asegurar que la compañía obtenga la retribución que le corresponde por sus derechos sobre Unix System V.
La compañía enviará además facturas a una serie de otras empresas que usan Linux o desarrollan soluciones para Linux. El precio que SCO ha determinado para una licencia desktop de Linux es de 199 dólares, mientras que una licencia para servidores asciende a 699 dólares.
SCO también contactará a fabricantes de equipos originales (OEM) que comercializan aparatos con Linux incrustado. Las intenciones de SCO son que las compañías OEM le paguen 32 dólares por cada unidad producida basada en Linux.
Consultado por ComputerWire, el presidente de Embedded Linux Consortium, Inder Singh, calificó el anuncio de SCO de un intento de extorsión, basado en el temor, la incertidumbre y la duda. Anteriormente, Red Hat e IBM calificaron en idénticos términos la estrategia de SCO.
