Al respecto, Kelley señaló que mucho se está haciendo, pero tememos que a nivel global nos estamos quedando rezagados, mientras los días pasan inexorablemente. Posteriormente, indicó que el problema es global y debe ser solucionado globalmente, ya que de otra forma todos padecerán los efectos. En tal sentido, Kelley desaconsejó subestimar los problemas que surgirían si los asociados extranjeros del sector bancario estadounidense no estaban preparados para hacer frente al bug del año 2000.
Kelley no indicó donde se realizará la conferencia, que constituirá un seguimiento a otra realizada en septiembre pasado, en que representantes de los bancos centrales de diez importantes países industrializados se dieron cita a fin de discutir el mismo tema.