Google se convierte en intermediario de servicios

Google ha comenzado a probar un servicio denominado “Helpouts”, que facilita el contacto entre ofertantes de servicios y consumidores. La empresa cobrará una comisión del 20% de las ganancias por “ayuda real, de gente real, en tiempo real”.

El servicio Helpouts está estructurado en torno a Google+ y el sistema de videoconferencia Hangouts. Mediante Helpouts, los usuarios con determinados conocimientos y habilidades pueden ofrecer su ayuda a usuarios que requieran de los mismos. Dependerá de ambas partes si el servicio será gratuito o pagado. Para el caso de las transacciones comerciales, Google gestionará los pagos, cobrando una comisión del 20% por oficiar de intermediario. Los servicios pueden ser pagados mediante tarjetas de crédito o débito, o con Google Wallet.

En la página de Helpouts se indica que el servicio está por ahora disponible por invitación. La empresa escribe: “Helpouts no está disponible aún, pero estamos actualmente invitando a personas con experiencia en un número de tópicos para ofrecer sus Helpouts cuando lancemos el servicio, y así comenzar a ganar dinero compartiendo sus habilidades y conocimientos con el mundo. Si aún no ha recibido una invitación pero se interesa por Helpouts, díganos y le avisaremos cuando el servicio sea lanzado y estemos recibiendo más solicitudes para ofrecer ayuda”.

Entre los servicios que Google por ahora presenta en la página piloto de Helpouts se incluye decoración y jardinería, computadoras y electrónica, salud y asesorías, nutrición y ejercicio, moda y belleza, arte y música, aparte de cocina y educación.

En otras palabras, Helpouts no es un servicio disponible aún, sino consiste de una página de bienvenida e información sobre el servicio en sí. Inicialmente, Google busca a personas interesadas en ofrecer sus servicios a terceros, de manera comercial. En la página de inicio es posible además solicitar una invitación.

Google pública además los requisitos para apuntarse al servicio. Las personas interesadas en ofrecer su ayuda deben ser mayores de 18 años, en tanto que la edad mínima para recibir la ayuda es igual a la de inscripción en Google+, es decir, 13 años.

El servicio incluirá una garantía de “100% de satisfacción con el servicio o devolución de su dinero”. Esto presupone que el usuario acepte que la conversación sea grabada, con el fin de que Google pueda tener toda la información posible al tramitar una eventual queja. Corresponde a los compradores de servicios decidir si la conversación puede ser grabada. El cliente pueda además iniciar la grabación en medio de la conversación, en caso de presentarse repentinamente la necesidad de hacerlo.

Si ambas partes están de acuerdo, la grabación del video de su conversación puede estar disponible para ambos. Esto puede ser especialmente valioso si, por ejemplo, hay detalles que deban ser recordados posteriormente.

Asimismo, Google utilizará las grabaciones para mejorar la calidad del servicio. La empresa precisa que no grabará conversaciones en las categorías de salud y asesorías, debido a que los temas abordados podrían ser confidenciales.

Ilustración: captura de Helpouts.


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