Desde la introducción de Internet en China, en 1994, las autoridades han usado todos los medios posibles de vigilancia y represión para neutralizar a opositores al régimen.
Microsoft, Yahoo y Google han hecho grandes concesiones ante el régimen de Beijing como parte de sus intentos por establecerse en el país asiático. Esto implica que las compañías censuran los resultados de las búsquedas hechas en sus buscadores, para dificultar el acceso al material considerado inadecuado por las autoridades.
Amnistía Internacional critica duramente tales prácticas, ya que implican aceptar y favorecer la censura en general, y la persecución de disidentes, en particular.
Yahoo delata a los disidentes
Las críticas más duras de Amnistía están dirigidas contra Yahoo. En varias oportunidades, la compañía ha revelado la identidad de disidentes ante las autoridades. En su informe, Amnistía Internacional señala que, en la práctica, la política de Yahoo ha contribuido a la represión de quienes piensan distinto, con serias consecuencias para los afectados.
La organización propone diversas medidas para mejorar la situación. Entre otras cosas, propone a las compañías mencionadas hacer públicos sus acuerdos con las autoridades chinas.
Imagen: Diseño de Lin Muchen – Amnistía Internacional.
